ÁNGEL DE MI GUARDA

Hoy es día de los Ángeles Custodios, no sé porque, siempre he tenido un sentimiento de ternura y confianza en este día. La verdad siempre he querido ser devota de mi ángel de la guarda, pero tengo que reconocer que lo olvido muy seguido. Por eso este día quiero celebrarlo, felicitarlo, bendecirlo, por todos los cuidados que tiene conmigo, por su dedicación a mi persona, por sus influencias divinas, sus inspiraciones, su protección, su fidelidad al Señor, por su incansable trabajo que no cesará hasta que con su ayuda me presente, un día, ante Dios. Y pedirle perdón por mi olvido y por todas la vergüenzas que le hago pasar con mi conducta, mis rechazos y pecados que lo han de abochornar mucho.

Y también quiero rezar esa primera oración que aprendí desde niña y que seguiré repitiendo hasta el día de mi muerte: Ángel de mi guarda, dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día.