COMULGAR FRECUENTEMENTE...
San Francisco de Sales nos responde..."Las clases de gente que necesitan comulgar a menudo son:
*Los perfectos, porque no deben a...
lejarse de Aquel que es fuente y manantial de su perfección y los imperfectos, pa...
ra que puedan aspirar a la perfección;
*Los fuertes para no debilitarse y los débiles para fortalecerse;
*Los enfermos para sanar y los sanos para no enfermar…
Y en cuanto a ti, imperfecto, débil y enfermo, debes comulgar frecuentemente
para recibir a Aquél que es tu perfección, tu fuerza y tu médico.
Los que tienen poco trabajo, necesitan comulgar frecuentemente porque les sobra tiempo y la ociosidad es peligrosa para el espíritu, y los que están muy atareados,
por la necesidad de alimento que requiere un arduo trabajo.
Digan a los que les pregunten, que comulgan a menudo para aprender a hacerlo bien, porque es imposible hacer algo bien
si no se practica con mucha frecuencia.
Comulguen a menudo, lo más a menudo que puedan.
Creedme, si las liebres en las montañas se vuelven blancas en invierno de tanto ver la nieve, así ustedes también, de adorar y comer la misma hermosura, bondad y pureza
en este divino Sacramento, llegarán a ser hermosura, bondad y pureza.»
QUE MI ALMA SE ENAMORE DE TÍ, JESÚS EUCARISTÍA
Tomado del facebook de Cristina Llano
ra que puedan aspirar a la perfección;
*Los fuertes para no debilitarse y los débiles para fortalecerse;
*Los enfermos para sanar y los sanos para no enfermar…
Y en cuanto a ti, imperfecto, débil y enfermo, debes comulgar frecuentemente
para recibir a Aquél que es tu perfección, tu fuerza y tu médico.
Los que tienen poco trabajo, necesitan comulgar frecuentemente porque les sobra tiempo y la ociosidad es peligrosa para el espíritu, y los que están muy atareados,
por la necesidad de alimento que requiere un arduo trabajo.
Digan a los que les pregunten, que comulgan a menudo para aprender a hacerlo bien, porque es imposible hacer algo bien
si no se practica con mucha frecuencia.
Comulguen a menudo, lo más a menudo que puedan.
Creedme, si las liebres en las montañas se vuelven blancas en invierno de tanto ver la nieve, así ustedes también, de adorar y comer la misma hermosura, bondad y pureza
en este divino Sacramento, llegarán a ser hermosura, bondad y pureza.»
QUE MI ALMA SE ENAMORE DE TÍ, JESÚS EUCARISTÍA
Tomado del facebook de Cristina Llano
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Bienvenido(a) a expresar tu opinión. Gracias por tu comentario. Dios te bendiga