Este domingo, si que fue diferente, cómo saben es poco lo que salgo y me muevo.... llevo una vida que le llamo de claustro..... sin embargo, este domingo en el que celebró el P. Juan su 40° Aniversario Sacerdotal, fui invitada. Asistí a la Parroquia a la misa de 5:30 de la tarde. Concelebrada con 11 sacerdotes y el Sr. Obispo, muy bonita, muy bien oraganizada, hasta me tocó participar con la elaboración de los folletos de la Plagaria Eucarística para que todos los sacerdotes la tuvieran. El Salmo cantado por una muchacha del coro, de lo más hermoso. Toda la celebración muy sencilla pero emotiva. El Sr. Obispo le habló muy bonito al Padre Juan, al final, le cantamos las mañanitas.
Al terminar la misa me encontré con mi querida y entrañable amiga Vicky (de los tiempos felices del apostolado en el SEDEC), y nos fuimos, junto con otras de sus compañeras de Catedral, al salón de festejos, llegamos temprano y escogimos una mesa en la que la refrigeración "nos favoreciera"... peroooo... hubo un problema eléctrico y por un buen rato se fue la luz.... fue enntonces que encendimos las velitas "del recuerdo" para iluminarnos.... pronto el calor se hizo sentir. (Ayer tuvimos una temperatura promedio de 45°) Sacamos nuestros abanicos de la bolsa y nos echamos aire, y los meseros nos llevaron "piña colada" (sin licor), con mucho hielo. Una amiga que nos acompañaba.... aprovechando la tenue luz de las velitas... fue a la mesa de honor que se encontraba vacía.... recolectó una de la velitas y unas galletas para completar la botana..... Después de un rato, volvio la luz... la temperatura se niveló y en eso llegó el Sr. Obispo y otros sacerdotes que tomaron su lugar en la saqueada "mesa de honor"...... y le decíamos a nuestra amiga: Mira, El Obispo está mirando para acá.... está preguntando por su velita..... al rato le decíamos: Mira, el Obispo dice que porqué no tiene galletas y te está viendo.... y eso fue reír y reír.... hasta que nos calló la boca porque nos dijo que éramos cómplices... ups.
Todo estuvo bonito, el grupo musical que amenizó la fiesta, realmente muy bueno, cantaban según el artista que interpetaban y parecía que estabamos escuchando a Luismi, o a Rocío Durcal hasta a Frank Sinatra y Whitney Houston.... la cena muy sabrosa y todos muy contentos, especialmente el P. Juan acompañado de las comunidades a las que ha servido en estos 40 años de su sacerdocio. Pasaron un video con fotos de las distintas épocas del Padre, desde su juventud, hasta la foto del recuerdo en la misa que se acababa de celebrar, muchos aplausos y mucha alegría.
Pero como la cenicienta.... las campanas de las 10:30 de la noche (no de las 12) me dijeron que tenía que volver a mi casita porque iba sola.... me despedí... encontré al P. Juan a la salida despidiendo a otras personas... seguía feliz y muy agradecido con todos.... dí la vuelta a la esquina para llegar al estacionamiento y estaba muuuuyyyyyy sooooolo.... me dio mello.. así como en las películas.... me subí rápido al carro.... eché los seguros y me vine a la casa sin mayor contratiempo.... Helena seguía despierta y como no está acostumbrada a que su mamá falte... se la pasó cuidando que estuviera en mi cama... cada cinco minutos pasaba a mi cuarto para checar que no me hubiera ido.... hasta que finalmente se durmió y yo también.... y como nos suele suceder a las personas que no andamos en ningún tipo de alboroto.... los acontecimientos vividos resonaron un buen rato en mi cabeza.
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