CATÓLICOS SORDOS

Cuando Benedicto XVI era el Papa, se oían voces crueles que lo criticaban, se burlaban y ridiculizaban sus gestos, no digo sus palabras, porque esos tales son gente sorda, no escucha, y, no son sordos de  nacimiento, simplemente se niegan a escuchar. Criticaban por lo que otros decían sin jamás escuchar la voz del Papa llena de caridad, sabiduría y esperanza.  Sin tomarse la molestia de leer sus escritos. Y cuando hablo de esos sordos criticones no son solo los de fuera de la Iglesia sino dentro, y no me refiero a la Curia a la que le achacan no se cuantos complots, me refiero a los "católicos de a pie". A esos que parlotean sin saber lo que dicen y que le creen a cualquier locutor ignorante de la tv sin cuestionarse siquiera si está mintiendo. Y cuando se les habla con la verdad y se les trata de explicar... se tapan los oídos.... es más interesante creer las mentiras, prefieren seguir en la morbosidad y el absurdo.

 

Y cuando el Papa renunció se alegraron pero sin dejar de criticarlo... sin dejar de juzgar lo que nunca entendieron, ni antes ni después...... luego llegó el Papa Francisco y a todos nos dejó con la boca abierta... sus gestos y actitudes humildes conmovieron muchos corazones.... sin embargo.... en ese mar de noticias otra vez las voces crueles..... la crítica volvió a levantar sus olas..... y los que siguen llamándose católicos, los mismos sordos, volvieron con la misma ligereza de antes a creer y copiar las críticas y burlas. Buscan como ciegos palpando entre el lodo a ver qué encuentran para juzgar lo que no entienden ni antes ni después. Que tristeza me da ver que hay tanta mala voluntad.

 

Estas reflexiones se deben a varios artículos que me han llegado por correo, y me han llegado de personas católicas, de esas personas a las que veo en misa y que comulgan y asisten a todos los retiros, cursos y pláticas religiosas.........