Jesús González Orendain. Fue siempre un "cura" de pueblo, él no tuvo, hasta donde yo recuerdo, puestos diocesanos, ni nombramientos, se dejó llevar por la voluntad de Dios.
El 13 de Octubre, día en que nací, fue a conocerme (esto lo contaba mamá) y le dijo: ¿te la bautizo? Y con el ropón de tía Esther mi madrina, en la capilla de la Maternidad "María Josefa" me bautizó, así, por su ministerio sacerdotal fui hecha hija de Dios a las pocas horas de nacida.Era cura en Linares en el templo de San Felipe Apóstol (ahora Catedral de Linares), y uno de mis primeros recuerdos es el día de mi Primera Comunión un 19 de Mayo. Me recibió en la entrada de la Iglesia con capa pluvial, eso impresionó mucho a mamá y siempre lo contaba, Tío me dijo quedito, no te persignes, porque yo me persignaba (todavía lo hago) con la izquierda, soy zurda, la verdad ya no me acuerdo si le hice caso o no, pero fue un día dulce y muy vagamente lo veo hablándome de la Eucaristía. Después en la casa parroquial el desayuno con abuelita, chocolate y pan, luego jugar y jugar…. Ya en la tarde oscureciendo
el regreso a Monterrey y lo veo como en sueños tomando mi cara entre sus manos y dándome un besote en la frente y a la "güera la gringa" amiga de la familia supongo, que me regaló un librito de "las parábolas de Jesús" que todavía lo conservo.





























“El demonio sin presas. “La pereza es la madre de todos los vicios"Esta anécdota está relatada por la misma santa en su diario espiritual, editado bajo el título:"La Divina Misericordia en mi alma".Estas son sus palabras:-En cierta ocasión vi a Satanás que tenía prisa y estaba buscando a alguien entre las hermanas, pero no la encontraba. Sentí en el alma la inspiración de ordenarle en nombre de Dios que me dijera a quién buscaba entre las hermanas. Y confesó, aunque de mala gana: "Busco las almas perezosas". Cuando volví a ordenarle en nombre de Dios que me dijera a qué almas del conven






